El poder del NO

Podría decir que soy feliz, a pesar de montones de cosas, ninguna terrible, y que existen por determinadas elecciones que he hecho, así que me las aguanto calladita. Sin embargo he decidido que ya no soporto más una de las consecuencias: el stress.

He resuelto que voy a pedir ayuda "profesional". Me duele la cabeza al menos una vez al día todos los días, sueño con el trabajo, de vez en cuando tengo un tic, duermo mal, me cuesta conciliar el sueño, siempre estoy pensando en el trabajo, me he llenado de granos, me resfrío seguido, vivo cansada, tengo el cuello y espalda llenos de nudos a pesar de los masajes (del único hombre autorizado para tocarme), estoy con los dientes apretados día y noche, se me seca la boca, las manos me tiemblan más de lo habitual,siento que tengo "la vista cansada", cambios de humor repentinos,sensación de frustración que me embarga de un modo anormal(yo creo), un tartamudeo apestoso que me sale cuando estoy nerviosa, taquicardia mínimo dos veces a la semana y ahora último una sensación de que voy a tener una especie de colapso nervioso...como dice una amiga "too much".

Voy a buscar un psiquiatra que trabaje los fines de semana, porque de lunes a viernes es imposible que vaya a un médico, o que vaya a cualquier parte.

Voy a aprovechar de pedirle que me "cure" de la homosexualidad...jajá, bueno, si no se puede que me convierta en asexual, así nunca más voy a sufrir por desamor.